domingo, 23 de octubre de 2011

BIOETICA

Tema 3
PRINCIPIOS DE LA BIOETICA
Dr. Marcelino Gonzales Isidro


1. Introducción

Como habíamos evidenciado en el tema 1 el término “bioética” fue utilizado por primera vez por V. R. Potter hace poco más de treinta años (Potter, 1971). Con este término aludía Potter a los problemas que el inaudito desarrollo de la tecnología plantea a un mundo en plena crisis de valores. Urgía así a superar la actual ruptura entre la Ciencia y la Tecnología de una parte y las Humanidades de otra. Ésta fisura hunde sus raíces en la asimetría existente entre el enorme desarrollo tecnológico actual que otorga al hombre el poder de manipular la intimidad del ser humano y alterar la biosfera, y la ausencia de un aumento correlativo en su sentido de responsabilidad por el que habría de obligarse a sí mismo a orientar este nuevo poder en beneficio del propio hombre y de su entorno natural.

La bioética surge por tanto como un intento de establecer un puente entre ciencia experimental y humanidades (Potter, 1971). De ella se espera una formulación de principios que permita afrontar con responsabilidad –también a nivel global- las posibilidades enormes, impensables hace solo unos años, que hoy nos ofrece la tecnología.

En dicho entendido y para preservar los principios bioéticos propuestos, en la Facultad de Medicina y también la Universidad Mayor de San Andrés como ente rectora de la Facultad Crearon el Comité de Ética en la Investigación, a su vez el Comité nacional de Bioética, los cuales desarrollan sus actividades

2. División de la bioética

Podemos dividir la bioética en una parte general o fundamental y una parte especial o aplicada. La bioética general se ocupa de los fundamentos éticos, de los valores y principios que deben dirigir el juicio ético y de las fuentes documentales de la bioética (códigos médicos, derecho nacional e internacional, normas deontológicas y otras fuentes que enriquecen e iluminan la discusión, como las biográficas, literarias o religiosas). La bioética especial se ocupa de dilemas específicos, tanto del terreno médico y biomédico como referentes al ámbito político y social: modelos de asistencia sanitaria y distribución de recursos, la relación entre el profesional de la salud y el enfermo, prácticas de medicina prenatal, el aborto, la ingeniería genética, eugenesia, eutanasia, trasplantes, experimentos con seres humanos, etc.

Es claro que el enfoque que se dé a la fundamentación (bioética general) condicionará las posibles soluciones que se ofrezcan a los dilemas (bioética especial). Así ocurre con el rechazo de la eutanasia en un modelo bioético basado en la búsqueda de la verdad sobre el hombre y en el reconocimiento y respeto de su especial dignidad, o –por el contrario- la entusiasta aceptación de la eutanasia en los modelos relativistas basados en la autonomía absoluta de la libertad individual.

En ocasiones se habla de bioética clínica o toma de decisiones. En ella se examinan dilemas nacidos en el ejercicio asistencial de la medicina, analizándose los valores éticos en juego y los medios concretos disponibles para resolver el conflicto de la mejor manera. Si bien el caso particular presenta matices a considerar y priorizar, la conducta no debería entrar en contradicción con los valores utilizados en la bioética en general.

La bioética es una disciplina:
Laica. Busca acuerdos racionales entre personas de diversas filiaciones religiosas o ateas. Es tolerante.

Plural. Reconoce y promueve la diversidad y trata de alcanzar acuerdos razonables entre diversas posturas dentro de una discusión que parta de mínimos compartidos. Reconoce la pluralidad no sólo como un hecho sino como un valor.
Autónoma. Es libre de influencias políticas, religiosas y económicas. Reconoce la capacidad de autorregulación del ser humano.
Racional, filosófica y discursiva. La realidad ética no se conoce a priori sino a través de la reflexión sobre las consecuencias de las decisiones.
Universal. Válida para todos, en cualquier lugar. Las decisiones deben ir más allá de los convencionalismos morales pues se aspira a decisiones responsables por vía del acuerdo intersubjetivo pero con base en acuerdos objetivos de mínimos como lo son los derechos humanos.
Interdisciplinaria. Comprende aspectos filosóficos, científicos, sociales, antropológicos, psicológicos, técnicos, legales, del cuidado de la salud y de la investigación en salud.
Intermediadora. Promueve mecanismos razonados y racionales para la toma de decisiones difíciles y para resolver conflictos.
Regulatoria o procedimental. Apoyo a los protocolos, procedimientos, cuerpos
colegiados.
Aplicada. Reflexiona y cuestiona problemas reales, cotidianos y concretos.


3. Bioética y ética médica

¿Acaso esta nueva disciplina viene a sustituir a la ética médica, disciplina que hasta hace poco ha venido guiando al profesional de la salud? En absoluto. Por el contrario, la ética médica permanece como matriz rectora y a la vez parte principal de la bioética. Así se deduce de la definición de bioética de la “Encyclopaedia of Bioethics”: estudio sistemático de la conducta humana en el ámbito de las ciencias de la vida y de la salud, analizada a la luz de los valores y principios morales" (Reich, 1978).

La ética médica no es sólo una parte de la bioética, sino que goza además de especial relevancia en el conjunto de la nueva disciplina. Por la riqueza de su tradición científica y humana - ausente en el resto de la bioética- posee un especial valor que no puede ser ignorado. La pretensión ilusoria de construir una “ética nueva” que habría de romper con la ética tradicional no sólo carece de fundamento sino que deja traslucir una notable ignorancia. Ciertamente la bioética – y con ella la ética médica- afronta hoy problemas nuevos, pero cuenta con los mismos medios de siempre para resolverlos: el uso juicioso de la razón y la luz de los valores y principios coherentes con la específica forma de ser del hombre. No puede ser de otra forma.

Por el contrario, sí resulta nuevo el talante dialogante, tolerante y respetuoso que preside el ejercicio bioético. Así lo exige la diversidad cultural e ideológica del mundo actual. Sin embargo, ser tolerante no significa rebajar las exigencias de la realidad, ni el reconocimiento de sus auténticas implicaciones éticas. Traduce en cambio la conciencia de que sólo una actitud de diálogo abierto y honesto, respetuoso con la legítima libertad de las conciencias, puede permitirnos avanzar juntos hacia el reconocimiento de los valores y principios auténticos. Que se vienen buscando desde los códigos de Núremberg en 1946. A su vez también la formulación de los principios éticos para las investigaciones médicas en seres humanos adoptada por la 18ª Asamblea Médica Mundial en Helsinki, Finlandia, Junio 1964.

Los principios pueden servir de apoyo en la argumentación orientada para identificar el curso de acción más razonable, sea en el marco de una reflexión estrictamente individual (autorregulación) o en entornos institucionales especializados (autorregulación social). En ambos marcos se busca que la acción práctica responda a ciertos valores. Los principios comprometen de entrada, pero no con la misma intensidad, pues la complejidad de los contextos donde pueden operar obliga a identificar criterios de aplicación, en ocasiones complejos. Quienes otorgan un carácter absoluto a los principios morales (enfoques deontologistas) los consideran válidos pese a las circunstancias y desarrollan estilos de argumentación moral de rigidez deductiva. Desde estos enfoques, resulta difícil cuando no imposible, abordar casos en los que algunos de estos principios colisionan.

Dentro de la bioética, la corriente principialista es una de las aproximaciones teóricas directamente relacionada con el desarrollo de la disciplina. En el centro de la misma se encuentran los principios ampliamente conocidos que se han retomado en la mayoría de los documentos éticos y normativos. El "Experimento Tuskegee"(también conocido como "Estudio Tuskegee sobre sífilis no tratada en varones negros", "Estudio sobre sífilis de los servicios públicos de salud") fue un estudio clínico llevado a cabo entre 1932 y 1972 en Tuskegee, Alabama (Estados Unidos), por los servicios públicos de salud americanos. Entonces, 399 aparceros afroamericanos, en su mayoría analfabetos, fueron estudiados para observar la progresión natural de la sífilis si no era tratada.
- Este experimento generó mucha controversia y provocó cambios en la protección legal de los pacientes en los estudios clínicos. Los sujetos utilizados en este experimento no dieron su consentimiento informado, no fueron informados de su diagnóstico, y fueron engañados al decirles que tenían "mala sangre" y que podrían recibir tratamiento médico gratuito, transporte gratuito a la clínica, comidas y un seguro de sepelio en caso de fallecimiento si participaban en el estudio. El experimento Tuskegee, citado como "posiblemente la más infame investigación biomédica de la historia de los Estados Unidos", trajo como consecuencia el Informe Belmont (Belton Report) de 1979 y la creación del Consejo Nacional de Investigación en Humanos (National Human Investigation Board), y la petición de la creación de los Consejos Institucionales de Revisión (Institutional Review Boards). Hoy en día (2008), existe la Oficina de Protección en la Investigación Humana (Office for Human Research Protections, OHRP) dentro del HSS (U.S. Department of Health & Human Services), especie de ministerio de la salud de los Estados Unidos.
Dicho Informe de Belmont, expresó los principios de respeto a las personas, de beneficencia y de justicia. Posteriormente, estos principios fueron ampliados y aplicados para la ética biomédica por Beauchamp y Childress(1999).

4. Principios Bioéticos
4.1 Autonomía.

Se refiere a la necesidad de respetar, tanto en acciones como en actitudes, a la capacidad y al derecho que poseen las personas para decidir entre las opciones que a su juicio son las mejores entre las diferentes posibilidades de las que se les haya informado, conforme a sus valores, creencias y planes de vida. Son decisiones respecto a su cuerpo y a su salud, tanto en términos de intervenciones como de investigación.
Este principio sustenta la necesidad de contar con un consentimiento informado ydel derecho a negarse a una intervención o participación en una relación clínica o de investigación.
No se refiere a la no interferencia con las decisiones del otro. Implica la obligación de crear y de mantener las condiciones para tomar decisiones autónomas al tiempo que se ayuda a despejar el temor y otras situaciones que destruyen o interfieren con las acciones autónomas. De este principio se desprende el deber de proteger a quienes no tienen esta capacidad.
En otras palabras define el derecho de toda persona a decidir por sí misma en todas las materias que la afecten de una u otra manera, con conocimiento de causa y sin coacción de ningún tipo.
Determina también el correspondiente deber de cada uno de respetar la autonomía de los demás.

4.2 Beneficencia.

Se trata de la obligación de hacer el bien. Es otro de los principios clásicos hipocráticos. El problema es que hasta hace poco, el médico podía imponer su propia manera de hacer el bien sin contar con el consentimiento del paciente (modelo paternalista de relación médico-paciente). Por lo tanto, actualmente este principio viene matizado por el respeto a la autonomía del paciente, a sus valores, cosmovisiones y deseos. No es lícito imponer a otro nuestra propia idea del bien.

Este principio positivo de beneficencia no es tan fuerte como el negativo de evitar hacer daño. No se puede buscar hacer un bien a costa de originar daños: por ejemplo, el "bien" de la experimentación en humanos (para hacer avanzar la medicina) no se puede hacer sin contar con el consentimiento de los sujetos, y menos sometiéndolos a riesgos desmedidos o infligiéndoles daños. Como dice Hans Jonas (1997 edición española), aunque la humanidad tiene un interés en el avance de la ciencia, nadie puede imponer a otros que se sacrifiquen para tal fin. Matizado de esta manera, el principio de beneficencia apoya el concepto de innovar y experimentar para lograr beneficios futuros para la humanidad, y el de ayudar a otros (especialmente a los más desprotegidos) a alcanzar mayores cotas de bienestar, salud, cultura, etc., según sus propios intereses y valores.
Define el derecho de toda persona de vivir de acuerdo con su propia concepción de la vida buena, a sus ideales de perfección y felicidad.
Íntimamente relacionado con el principio de autonomía, determina también el deber de cada uno de buscar el bien de los otros, no de acuerdo a su propia manera de entenderlo, sino en función del bien que ese otro busca para sí.
También se puede usar este principio (junto con el de justicia) para reforzar la obligación moral de transferir tecnologías a países desfavorecidos con objeto de salvar vidas humanas y satisfacer sus necesidades básicas.

4.3 No Maleficencia.

Este principio ya se formuló en la medicina hipocrática: “Primum non nocere”, es decir, ante todo, no hacer daño al paciente o primero no hacer daño. Se trata de respetar la integridad física y psicológica de la vida humana.
También define el derecho de toda persona a no ser discriminada por consideraciones biológicas, tales como raza, sexo, edad, situación de salud, etc.
Es relevante ante el avance de la ciencia y la tecnología, porque muchas técnicaspueden acarrear daños o riesgos. En la evaluación del equilibrio entre daños-beneficios, se puede cometer la falacia de creer que ambas magnitudes son equivalentes o reducibles a análisis cuantitativo. Un ejemplo actual sería evaluar el posible daño que pudieran ocasionar organismos genéticamente manipulados, o el intento de una terapia génica que acarreara consecuencias negativas para el individuo.
Determina el correspondiente deber de no hacer daño, aun cuando el interesado lo solicitara expresamente.
4.4 Justicia.

Es el principio por el cual se pretende que la distribución de los beneficios, los riesgos y los costos en la atención sanitaria o en la investigación, se realicen en forma justa. Es decir, que se distribuyan equitativamente entre todos los grupos de la sociedad, tomando en cuenta la edad, el sexo, el estado económico y cultural, y consideraciones étnicas. Se refiere, asimismo, a que todos los pacientes en situaciones parecidas deban tratarse de manera similar y con las mismas oportunidades de acceso a los mejores métodos diagnósticos y terapéuticos.

Y se define el derecho de toda persona a no ser discriminada por consideraciones culturales, ideológicas, políticas, sociales o económicas.

A la vez consiste en la distribución equitativa de recursos económicos. Las provisiones de recursos tecnológicos, científicos, humanos y, en definitiva, económicas, necesarias en la práctica médica moderna, que no puede ser solventada exclusivamente por el enfermo o los familiares. Por eso se requiere alguien que administre técnicamente estos recursos, respetando en la asignación de los mismos con el principio de justicia.

Esto ha realzado la figura del administrador, el cual es un técnico imprescindible en la actual relación médico-paciente. Aun cuando hay quienes sostienen que la asignación de recursos no es competencia médica sino política, es importante reflexionar sobre dos puntos: si la sociedad se desembaraza de los médicos para asignar recursos en salud, el principio de beneficencia puede ser excluido como criterio para la toma de decisiones; si por el contrario, la sociedad reclama una mayor participación médica en este campo y los profesionales de la salud se desentienden, les será impuesta esta limitación por personas no médicas y según criterios no médicos.

Determina el deber correspondiente de respetar la diversidad en las materias mencionadas y de colaborar a una equitativa distribución de los beneficios y riesgos entre los miembros de la sociedad.

Bibliografía.

Potter V.R. Bioethics: the science of survival, "Perspectives in Biology and Medicine" New York, 1970.
The Tuskegee Syphilis Study, 1932 to 1972: implications for HIV education and AIDS risk education programs in the black community. Am J Public Health. 1991 November; 81(11): 1498–1505
Tapiero A. Los principios bioéticos. An. Med. Interna (Madrid) v.18 n.12 Madrid dic. 2001
Azulay A. Dilemas bioéticos en la situación de enfermedad terminal y en el proceso de la muerte. Med Pal 2000; 7: 145-56


Tema 4


REGLAS ÉTICAS DE CONFIDENCIALIDAD, VERACIDAD Y FIDELIDAD
Dr. Diego A. Sánchez Villca

1. INTRODUCCIÓN

Los principios fundamentales de la bioética analizados tienen una estrecha relación con las reglas éticas básicas, estas reglas ayudan a un buen desempeño de la labor del médico en la práctica profesional, son de suma importancia en el actuar diario del profesional y deben ir desarrollándose desde la formación del médico, las reglas éticas de la confidencialidad, la veracidad y fidelidad marcan una actitud de madurez personal y profesional que uno nunca deja de aplicar en su vida.

2. REGLA DE LA CONFIDENCIALIDAD

La confidencialidad en una regla ética asociada a varias profesiones como medicina, derecho, religión, psicología, y el periodismo, en los cuales se lo denomina “secreto profesional”. En ética algunos tipos de comunicación entre una persona y uno de estos profesionales son "privilegiados" y no pueden ser discutidos o divulgados a terceros. La confidencialidad determina que el médico no revele información privada de sus pacientes a otras personas, la confidencialidad se basa en el respeto a la intimidad del paciente.

2.1. FUNDAMENTACIÓN

La confidencialidad en la práctica médica tiene su base en el Juramento Hipocrático que dice: "todo lo que viere u oyere en mi profesión o fuera de ella, lo guardaré en reservado sigilo", el El Juramento de Asaf establece entre los hebreos dedicados a la salud que "no revelarás secretos que se te hayan confiado".
A mediados del siglo XX el Código Internacional de Etica Médica de la Asociación Médica Mundial, del año 1949 (modificado en 1983) establece que: "El médico debe, aún después de la muerte del paciente, preservar absoluto secreto en todo lo que se le haya confiado".
En su 27ª Asamblea Mundial de Munich 1973 en su resolución sobre el "Secreto Médico" establece: "...reafirma la importancia vital del mantenimiento del secreto médico, no como un privilegio para el médico, sino para proteger la vida privada del individuo como la base de una relación confidencial entre el paciente y su médico”
El código deontológico español nos refiere: “El secreto médico es uno de los pilares en los que se fundamenta la relación médico‐paciente, basada en la mutua confianza, cualquiera que sea la modalidad de su ejercicio profesional”
El artículo 3 de la ley 3131 de la Ley del ejercicio profesional médico nos indica “En el ejercicio profesional médico, inclusive en la enseñanza de la medicina, el secreto médico es inviolable”
Por todo lo escrito anteriormente la confidencialidad es una norma muy importante para el personal médico, y no solamente presenta fundamentación histórica, filosófica, legal, sino es un requisito necesario para desarrollar la profesión.

2.2. DILEMAS MÉDICOS DE CONFIDENCIALIDAD
La confidencialidad en ciertas ocasiones no es una obligación absoluta, existen diversos factores que pueden obligar al profesional médico a revelar el “secreto médico” como cuando está en juego la vida del mismo individuo o la de otras personas, o existe riesgo de que por guardar el secreto se provoquen gravísimos daños a la sociedad o a otros individuos concretos, esta norma queda subordinada al principio de Beneficencia, que incluye velar no solo por la integridad de la vida de cada persona sino también por el bien común.
Para poder elegir la opción más adecuada podríamos aplicar el imperativo "prima fascie", que quiere decir, "en principio". Esto significa que debe buscar siempre lo mejor para el paciente o la sociedad.
La normativa boliviana establece el artículo 17 de la ley 3131 que el secreto médico puede ser revelado si:

a) el paciente o su responsable lo permitan.
b) Como médico forense a requerimiento dela autoridad competente.
c) Cuando se trate de casos de enfermedad notificable.
d) Cuando la salud de la familia y la comunidad se encuentren en riesgo inminente.
e) En caso de menores de edad a los padres, parientes o responsables de los mismos.
f) Cuando la Ley disponga expresamente.



3. LA REGLA DE VERACIDAD
La práctica cotidiana de dar información al paciente pone permanentemente en tensión el deber de decir la verdad por parte del médico y el derecho a saber la verdad por parte del paciente y nos plante hasta qué punto uno debe brindar información para no confundir al paciente, provocarle una excesiva ansiedad o ser contraproducente para la relación médico-paciente.
La veracidad es expresar la verdad considerando que el prójimo requiere de nosotros una actitud gentil, honesta, hacerlo con tacto, acomodando nuestras palabras para cada individuo, teniendo en mente su personalidad y estilo de comunicación. Es una regla subordinada al principio de Autonomía, que exige que una persona deba ser informada verazmente.

3.1. FUNDAMENTACIÓN
El principio que le da fundamento a esta norma es el de respeto por la autonomía de las personas, no solicitar el consentimiento de una persona sería no respetar su autonomía. Y una persona no puede dar su consentimiento si no recibe la información veraz y clara para que pueda decidir.
El código deontológico y de ética médica boliviano señala en su artículo 15 sobre la atención de calidad: “Es obligación del médico ofrecer al enfermo la mejor atención, con todos los conocimientos que estén a su alcance y recursos disponibles. Cuando esto no sea posible, debe informar de ello al paciente con veracidad y oportunidad”
La veracidad es una norma que requiere un compromiso del médico, también un ejercicio y análisis profundo de la situación del paciente puesto que no todas las personas responden de la misma manera a determinadas situación, más aun cuando se trata de la salud o la vida propia o de un familiar.
Pensando en esta situación el código deontológico español señala en su artículo 15 lo siguiente: “El médico informará al paciente de forma comprensible, con veracidad, ponderación y prudencia. Cuando la información incluya datos de gravedad o mal pronóstico se esforzará en transmitirla con delicadeza de manera que no perjudique al paciente.”

3.2. DILEMAS MÉDICOS DE VERACIDAD
Hay que considerar también que la "verdad" sobre una enfermedad o sobre una situación no siempre es "totalmente cierta". Hay en la práctica médica una cierta dosis de incertidumbre y de "apertura a la esperanza". Decir "la verdad" es también decir "la esperanza" y “la incertidumbre”. Comunicar la verdad no equivale a suprimir la esperanza o suprimir el sentido. El médico tiende muy pronto a pensar que una noticia mala lleve al paciente a pensar que "todo" sentido para su vida se va a perder. Probablemente en esto influya la propia concepción de sentido de la vida. El médico con sus angustias no resueltas tiende a proyectar en el paciente su propia incapacidad de vivir un sentido en medio de una situación limitada. La veracidad en los casos límites desentraña una limitación.
A manera de síntesis podríamos decir que la regla de veracidad es requisito imprescindible para que el principio de autonomía pueda ejercerse. Cuando la veracidad es base de la relación médico-paciente y el derecho al respeto se reconoce como inmanipulable entonces aparece el acuerdo sincero que da lugar al consentimiento válido por parte del paciente.
El consentimiento voluntario formulado por el Código de Nüremberg cuando evaluó los hechos de la segunda guerra cuando se realizaban experimentos inhumanos y fuera de toda ética en personas a servido para formular los conceptos centrales de toda relación dual entre un profesional de la salud y una persona.

4. LA REGLA DE FIDELIDAD
La fidelidad es una regla que genera un compromiso, que uno asume de realizar alguna cosa en beneficio de alguien. Por fidelidad (o lealtad) se puede entender al mismo tiempo una virtud y una norma. Aquí nos referiremos a la fidelidad no como virtud sino como norma generada por un acuerdo bilateral o promesa.

4.1. FUNDAMENTACIÓN

El juramento Hipocrático incluye los tres elementos que componen una verdadera promesa, tal como veremos enseguida. En primer lugar formula el objetivo del juramento que es hacer todo lo posible por el bien de los enfermos. Quizá la frase más explícita en este sentido sea la que dice "En cuantas casas entrare, lo haré para bien de los enfermos, apartándome de toda injusticia voluntaria y de toda corrupción...". En segundo lugar, el juramento hipocrático está hecho delante de testigos: "juro por Apolo...y todos los dioses y diosas". En tercer lugar establece que el médico está dispuesto a reparar los posibles daños que se deriven de no cumplir la promesa que se jura solemnemente: "Juro...cumplir fielmente según mi leal saber y entender, este juramento y compromiso". Y más abajo concluye: "Si este juramento cumpliere íntegro, viva yo feliz y recoja los frutos de mi arte y sea honrado por todos los hombres y por la más remota posteridad. Pero si soy transgresor y perjuro, avéngame lo contrario".

El Juramento hipocrático no tiene ninguna cláusula que establezca que el médico se compromete a cuidar de la salud de su paciente. Sin embargo por el conjunto del texto puede deducirse fácilmente que ese es el sentido del juramento. Quizá la frase más explícita en este sentido sea la que dice "En cuantas casas entrare, lo haré para bien de los enfermos, apartándome de toda injusticia voluntaria y de toda corrupción...".

Tanto el profesional como el paciente aceptan iniciar un acuerdo en base a dos condiciones mínimas: El profesional promete brindar determinados servicios y el paciente promete recibirlos siempre y cuando el cliente cumpla con determinadas instrucciones y el profesional con determinadas conductas tanto técnicas como éticas

Otro ejemplo bastante explícito de la obligación que genera el acuerdo de la relación entre un profesional y su cliente es el art. 33 del Código de los Médicos de los Países europeos (1986), donde se dice: "El médico que acepta prestar sus cuidados a un paciente, se compromete a asegurar la continuidad de los cuidados procurando contar con la ayuda de sus asistentes, suplentes o asociados".

Algunos códigos son más explícitos que otros en cuanto a la expresión del juramento de una promesa. Así, por ejemplo, la Declaración de Ginebra de la Asociación Mundial de Médicos (A.M.M.1948/1983) dice: "Prometo solemnemente consagrar mi vida al servicio de la profesión... Hago estas promesas solemnemente de forma libre y por mi honor". El Código Internacional de Etica Médica de la A.M.M. redactado después de la Declaración de Ginebra también afirma que: "Todo médico debe a su paciente completa lealtad y todos los recursos de su ciencia".

La promesa -implícita- por parte del profesional consiste en afirmar según que:

"yo me comprometo a hacer todo lo posible de mi parte para que usted pueda satisfacer la necesidad que experimenta, siempre que confíe en mi ciencia y mi arte y eso no tenga por cometido primario el perjudicar a terceros, sino el facilitarle a Ud. el ejercicio de sus legítimos derechos o deberes y por lo tanto no vaya contra la ética y la ley".

El paciente que solicita los servicios profesionales, por otro lado, afirma implícita o explícitamente algo así como lo siguiente:

"yo me comprometo a confiar en usted y a seguir sus sugerencias para obtener lo que necesito, si esto está dentro de las posibilidades de su ciencia y de su arte, si tiene como cometido exigir mis legítimos derechos o posibilitar mis deberes y no atenta contra mis valores éticos"

Para terminar, podemos sintetizar tres modelos diferentes de enfocar el acuerdo persona -profesional:

1. el profesional como agente de "servicios" específicos que está "por encima" del cliente y decide los medios, condiciones y límites del servicio que presta, admitiendo que la persona intervenga en la decisión solamente en lo que se refiere a aceptar o no el resultado final que se quiere lograr con la intervención profesional.

2. El profesional como agente del cliente. Este último es el que "contrata y el que decide lo que se hace de acuerdo al dinero que paga. En este esquema, -a la inversa del anterior- el profesional es un "empleado" del cliente, y este es el que manda lo que hay que hacer y modula su influencia según el dinero.

3. El profesional como asesor calificado y comprometido con la persona que solicita sus servicios. En este esquema el acuerdo ético entre profesional y persona es la relación entre dos sujetos libres, autónomos y éticamente rectos, que se benefician mutuamente de la relación para buscar que uno y otro pueda ejercer sus legítimos derechos o deberes para consigo mismo y para con la sociedad.

Parecería que desde el punto de vista ético esta última fórmula es la que satisface los derechos y deberes de uno y de otro de los que están implicados en la relación profesional. Los términos concretos de esa forma de acuerdo pueden quedar formulados en un consentimiento escrito desde el principio. Es la mejor manera de evitar dificultades posteriores.


5. CASOS DE DISCUSIÓN COLECTIVA

1. Un profesional de salud de 10 años de trabajo ha estado asistiendo a un curso actualización en el tratamiento de la diabetes, durante las sesiones muchos promotores farmacéuticos le dan medicamentos nuevos para el tratamiento de la enfermedad, días después empezó a aplicar sus nuevos conocimientos mientras repasaba los temas y esquemas en sus tiempos libres.

2. Un profesional recién egresado es contratado por una clínica y dentro de las muchas recomendaciones del dueño de la clínica esta una en la cual se le indica que debe por lo menos internar a un paciente a la semana para seguir trabajando en esta institución.


3. Este un caso que propone analizar una situación desde 2 puntos de vista.
A. Un médico está realizando una investigación clínica, siempre se jacta de ser correcto y de saber más que nadie, nunca asiste a las reuniones con la excusa de una emergencia, delega el trabajo a sus subalternos entre los que te encuentras tú, siempre ignora a los profesionales jóvenes o los que no le caen bien, recientemente te has enterado que el estudio clínico no tiene un buen diseño, los datos analizados están duplicados y están sobredimensionados, este manuscrito se ha enviado a una revista con estos datos fraudulentos.

B. Un médico está realizando una investigación clínica, es un buen amigo y siempre te levanta el ánimo cuando estas agobiado por el trabajo, se lleva bien con todo el mundo, son hinchas del mismo equipo, llega tarde a las reuniones pero siempre trae alguna merienda, dedica tiempo para capacitar a los profesionales jóvenes en sus nuevas tareas, recientemente te has enterado que el estudio clínico no tiene un buen diseño, los datos analizados están duplicados y están sobredimensionados, este manuscrito se ha enviado a una revista con estos datos fraudulentos.

4. Acude al establecimiento de salud una paciente a recibir el resultado de sus estudios, los mismos que indican un cáncer terminal; la paciente no tiene ningún familiar presente en la consulta exceptuando a su pequeño hijo de escasos 6 años, la paciente ingresa tranquilamente junto al pequeño a recibir la noticia.


BIBLIOGRAFÍA
Asociación Médica Mundial. MANUAL DE BIOÉTICA. Francia: Editorial AMM, 1º Ed., 2005.
Gaceta Oficial: LEY DEL EJERCICIO PROFESIONAL MEDICO – Ley 3131
Código de ética y deontología médica.




Tema N 5
Consentimiento Informado
Dr. Wilson R. Morochi Lima
1. Introducción
El consentimiento informado tiene que ver con el proceso de recibir información suficiente y clara sobre un procedimiento terapéutico o diagnóstico entender esa información y como consecuencia tomar una decisión libre de aceptación o rechazo, sin embargo pese a la abundante bibliografía y a varios pronunciamientos judiciales existentes sobre el tema, los contornos del llamado consentimiento informado aún no han sido bien delimitado, esto complica seriamente la relación médico paciente sobre todo si se tiene en cuenta que la práctica médica más sencilla encierra siempre todo tipo de riesgos para el paciente.
El consentimiento informado es una herramienta. Expresa el concurso de voluntades debidamente conocedoras, competentes y autónomas.
La no obtención del consentimiento informado puede significar una lesión a los derechos del paciente, pero no es la causa del daño así como el consentimiento informado no legítima la mala praxis.
Hoy en día, la Dignidad de la persona resulta indiscutible y es fundamento de todo el ordenamiento. Su reconocimiento es expreso en todas las leyes supremas. De ello se deriva que el derecho al consentimiento informado esté catalogado entre los más importantes derechos humanos
En el desarrollo del consentimiento informado, en un primer momento apareció la necesidad de requerir el mero asentimiento del paciente.
El primer gran antecedente data en realidad de 1914 y fue dictado en la causa “Schoendorff vs/ Society of New York Hospital”. En dicho precedente judicial se sostuvo que “todo ser humano adulto y sano mentalmente, tiene derecho a determinar qué es lo que el hará con su propio cuerpo, debiendo responsabilizarse al cirujano que practique una operación sin el consentimiento de su paciente”.
Se ha dicho que el consentimiento informado implica una declaración de voluntad suficiente efectuada por un paciente, por la cual, luego de brindársele una suficiente información referida a la dolencia, al procedimiento o intervención que se le propone. Como la relación médico-paciente es una relación fiduciaria, se genera la obligación de dar información por lo que el consentimiento informado se convierte en un instrumento necesario para armonizar y equilibrar las relaciones clínicas.
Si bien el proceso se realiza dentro de un ámbito clínico- quirúrgico, su epistemología básica es jurídica, aunque no se trate de un acto jurídico puro, sino más bien una declaración de voluntad o un mero acto lícito.
Para que una decisión tenga relevancia jurídica y sea considerada como voluntaria deben existir tres elementos internos: discernimiento, intención y libertad y un elemento externo: la exteriorización de la voluntad.

2. Definición de Consentimiento Informado
Es una de las reglas éticas fundamentales que modelan la responsabilidad médica, que se deriva de la aplicación armónica de los principios de dignidad, respeto por la autonomía y confianza de las personas, de la misma forma que las reglas de veracidad y confidencialidad. Para que sea válido debe cumplir con los criterios de voluntariedad, información suficiente y competencia.
La edición de 1984 del Manual de Ética del Colegio de Médicos Americanos define al consentimiento informado de la siguiente manera: “El consentimiento informado consiste en la explicación a un paciente atento y normalmente competente de la naturaleza de su enfermedad, así como del balance entre los efectos de la misma y los riesgos y beneficios de los procedimientos terapéuticos recomendados, para a continuación solicitarle su aprobación para ser sometido a esos procedimientos.

El código de Núremberg lo define: “El consentimiento voluntario del sujeto es absolutamente esencial. Esto significa que la persona involucrada debe tener capacidad legal de dar el consentimiento; debe estar en condiciones que permitan el libre ejercicio del poder de elección sin la intervención de ningún elemento de presión, fraude, engaño, coacción o compulsión; debe tener el conocimiento y la comprensión suficientes de los elementos en juego en la investigación, que le permitan una decisión lúcida y con conocimiento de causa”.

La presentación de la información al paciente debe ser comprensible y no sesgada; la colaboración del paciente debe ser conseguida sin coerción; el médico no debe sacar partido de su potencial dominancia psicológica del paciente”.
Obviamente que la exigencia del consentimiento informado supone que alguien puede negarse a ser sometido a un tratamiento médico, esta negativa del paciente a someterse a una práctica médica son cara y contracara de un mismo fenómeno.

"En la actualidad existe una cierta psicosis en la clase médica por dejar documentado el consentimiento de todo paciente que va a ser sometido a una intervención quirúrgica, por lo que desde ciertos sectores se preconiza el uso de protocolos específicos de información y consentimiento, estimando que les protegerán, a modo de paraguas, contra futuras reclamaciones".
En la información que se da al paciente se deben incluir tanto los riesgos como las ventajas de la práctica médica. El gran problema frente al cual se puede encontrar el médico es que si informa absolutamente todo, es muy posible que el paciente lisa y llanamente se asuste y no quiera asumir el tratamiento médico propuesto. Esto se complica si se tiene en cuenta que hasta el tratamiento médico más simple tiene sus riesgos.
Se ha señalado que la información a dar al paciente debe incluir:
a- descripción del procedimiento propuesto, tanto de sus objetivos como de la manera en que se llevará a cabo.
b- riesgos, molestias y efectos secundarios posibles,
c- beneficios del procedimiento a corto, mediano y largo plazo.
d- posibles procedimientos alternativos y sus riesgos y ventajas
e- efectos previsibles de la no realización de ninguno de los procedimientos posibles,
f- comunicación al paciente de la disposición del médico a ampliar toda la información si lo desea, y a resolver todas las dudas que tenga,
g- comunicación al paciente de su libertad para reconsiderar en cualquier momento la decisión tomada.
h- los costes del tratamiento
En un intento de clasificar los riesgos y su necesidad de ser informados, se lo ha hecho de la siguiente manera:
1- Riesgos insignificantes pero de común ocurrencia: deben ser Informados
2- Riesgos insignificantes y de escasa ocurrencia: no es necesario que sean informados.
3- Riesgos de gravedad y común ocurrencia: deben ser detalladamente informados
4- Riesgos graves de escasa ocurrencia: deben ser informados.
En nuestro país, el consentimiento informado es fundamental si se considera la escasa jurisprudencia nacional, y la posibilidad de que se relacione la presencia de un daño con la falta de obtención del instrumento.
El consentimiento informado no excluye la responsabilidad del profesional médico del daño emergente de una mala praxis. Lo esencial del proceso es dejar constancia de un acuerdo entre las partes a través de la información y del entendimiento de los actos profesionales.

3. Características.
La obtención del consentimiento informado debe cumplir 3 requisitos:
Voluntariedad: El/la paciente debe decidir libremente someterse a un tratamiento o prueba diagnóstica, sin que haya persuasión, manipulación o coerción.
Información: Es el proceso de explicación que realiza el médico tratante al paciente y/o familiares como parte de su obligación contemplada en la ley 3131. La información debe ser comprensible e incluir el objetivo del tratamiento o prueba diagnóstica, su procedimiento los beneficios y los riesgos potenciales.
Comprensión: Es la capacidad del paciente y/o familiar de entender la información que se le dé sobre la situación de salud, a partir de una explicación clara y sencilla pero suficiente sobre el procedimiento.

4. El consentimiento informado en Bolivia.
La ley 3131 Del Ejercicio Profesional Médico, establece que el consentimiento informado se constituye en un Documento medico oficial. En tanto que el decreto supremo 28562 indica que el consentimiento expreso, se refiere a la voluntad o decisión del paciente de rechazar el tratamiento u hospitalización indicado por el médico tratante, registrado en la historia clínica y debidamente respaldado con la firma del paciente, del familiar o representante legal, se dispone que el llenado de este instrumento es responsabilidad del médico. En consecuencia su incumplimiento puede traer perjuicios profesionales y patrimoniales en caso de litigio

5.- Cartas de Derechos de los Pacientes
a) Código de Nüremberg (1947)
b) Primera Carta de Derechos (1970) elaborada por la Comisión Conjunta de Acreditación de Hospitales Americana.
c) Carta de Derechos del Paciente aprobada por la Asociación Americana de Hospitales (1973)
d) Carta de los Derechos y Deberes de los Pacientes de Francia (1974)
Si bien el Código de Nüremberg de 1947 hacía referencia explícita al consentimiento voluntario del sujeto, no fue hasta 1964 en que se formuló la Declaración de Helsinki y 1966 en que W.H. Stewart, estableciera el requerimiento del consentimiento informado, cuando la comunidad médico-científica se planteó con seriedad la trascendencia de este principio ético. El mismo que al pie de la letra indica:

6.- El Consentimiento Informado en la Investigación
En 1931, el Ministerio de Sanidad del Reich alemán, promulgó unas estrictas normas sobre experimentación con seres humanos y aplicación de nuevos productos terapéuticos en medicina. Estas normas son de algún modo el primer código ético sobre ensayos clínicos. Constan de 14 artículos, de los cuales 4 están dedicados al Consentimiento Informado.
El consentimiento informado es un proceso de comunicación:
• Entre el investigador y el participante.
• Comienza antes de que se inicie la investigación, Continúa durante todo el estudio.Los Elementos Esenciales Del Consentimiento Informado deben incluir: la descripción de la investigación sus riesgos, beneficios, alternativas, confidencialidad, la indemnización, duración del estudio, la explicación de la aleatorización o placebo, Los riesgos de la investigación: (Anticipados o previsibles Físicos, sociales y psicológicos) la descripción de los beneficios: (esperados, Sin exageración, Beneficios disponibles una vez que termina la investigación

7.- Consentimiento Informado: Niños y Adolescentes
Se acepta que la autoridad y responsabilidad, la tienen los progenitores siempre que la ejerzan en beneficio del pequeño.
El concepto de patria potestad implicaba que los padres eran dueños de sus hijos.
En la práctica, se tiende a una “responsabilidad compartida” entre profesionales y padres. El profesional que tiene como deber ético primordial no dañar al paciente, recomienda aquella actuación que desde el punto de vista técnico presenta un mayor beneficio y/o un menor riesgo para el niño.
En la decisión influyen también, cuestiones de valores, y en éstas, la autoridad moral es de los padres. Son los padres, a través del Consentimiento Informado y correctamente asesorados, los que aceptarán el curso de acción recomendado como razonable para su hijo.
Ante el rechazo hacia un determinado procedimiento, se encuentran mal definidos tanto desde el punto de vista ético como del legal, los límites del derecho a rechazar un tratamiento vital. Sería necesario un acuerdo y consentimiento de los padres; además se debería solicitar el asesoramiento e informe favorable del Comité de Etica, y si se considera oportuno, el visto bueno de la autoridad judicial.

8.- Bibliografía
1) Antonio FRAGA MANDIAN y Manuel María LAMAS MEILAN “El consentimiento
Informado (El consentimiento del paciente en la actividad médico-quirúrgica)” Edit.
Revista Xurídica Galega, España 1999
2) Elena I. HIGHTON y Sandra M. WIERZBA “La relación médico-paciente: el
Consentimiento informado” Edit. Ad-Hoc, 1991, pág. 11.
3) Antonio FRAGA MANDIÁN y Manuel María LAMAS MEILÁN "El consentimiento
Informado" op. Cit. Pág. 61.
4) María Patricia CASTAÑO DE RESTREPO “El consentimiento informado del paciente en la responsabilidad médica” op. cit., pág. 195.

Estos pacientes no dieron su consentimiento informado, no fueron informados de su diagnóstico, y fueron engañados al decirles que tenían "mala sangre" y que podrían recibir tratamiento médico gratuito, transporte gratuito a la clínica, comidas y un seguro de sepelio en caso de fallecimiento si participaban en el estudio, estudio que duro 40 años
Por esta razón se elaboró el primer código internacional de ética para las investigaciones con sujetos humanos, se promulgo en 1947 durante el Proceso de Núremberg por crimines de guerra
Código de Núremberg Estableció normas para realizar investigaciones con seres humanos, poniendo como prioridad el consentimiento voluntario de los sujetos. Comprende 10 puntos
1. Es absolutamente esencial el consentimiento voluntario del sujeto humano. Esto significa que la persona implicada debe tener capacidad legal para dar consentimiento; su situación debe ser tal que pueda ser capaz de ejercer una elección libre, sin intervención de cualquier elemento de fuerza, fraude, engaño, coacción u otra forma de constreñimiento o coerción; debe tener suficiente conocimiento y comprensión de los elementos implicados que le capaciten para hacer una decisión razonable e ilustrada. Este último elemento requiere que antes de que el sujeto de experimentación acepte una decisión afirmativa, debe conocer la naturaleza, duración y fines del experimento, el método y los medios con los que será realizado; todos los inconvenientes y riesgos que pueden ser esperados razonablemente y los efectos sobre su salud y persona que pueden posiblemente originarse de su participación en el experimento. El deber y la responsabilidad para asegurarse de la calidad del consentimiento residen en cada individuo que inicie, dirija o esté implicado en el experimento. Es un deber y responsabilidad personales que no pueden ser delegados impunemente.
2. El experimento debe ser tal que dé resultados provechosos para el beneficio de la sociedad, no sea obtenible por otros métodos o medios y no debe ser de naturaleza aleatoria o innecesaria.
3. El experimento debe ser proyectado y basado sobre los resultados de experimentación animal y de un conocimiento de la historia natural de la enfermedad o de otro problema bajo estudio, de tal forma que los resultados previos justificarán la realización del experimento.
4. El experimento debe ser realizado de tal forma que se evite todo sufrimiento físico y mental innecesario y todo daño.
5. No debe realizarse ningún experimento cuando exista una razón a priori que lleve a creer el que pueda sobrevenir muerte o daño que lleve a una incapacitación, excepto, quizás, en aquellos experimentos en que los médicos experimentales sirven también como sujetos.
6. El grado de riesgo que ha de ser tomado no debe exceder nunca el determinado por la importancia humanitaria del problema que ha de ser resuelto con el experimento.
7. Deben realizarse preparaciones propias y proveerse de facilidades adecuadas para proteger al sujeto de experimentación contra posibilidades, incluso remotas, de daño, incapacitación o muerte.
8. El experimento debe ser realizado únicamente por personas científicamente cualificadas. Debe exigirse a través de todas las etapas del experimento el mayor grado de experiencia (pericia) y cuidado en aquellos que realizan o están implicados en dicho experimento.
9. Durante el curso del experimento el sujeto humano debe estar en libertad de interrumpirlo si ha alcanzado un estado físico o mental en que la continuación del experimento le parezca imposible.
10. Durante el curso del experimento el científico responsable tiene que estar preparado para terminarlo en cualquier fase, si tiene una razón para creer con toda probabilidad, en el ejercicio de la buena fe, que se requiere de él una destreza mayor y un juicio cuidadoso de modo que una continuación del experimento traerá probablemente como resultado daño, discapacidad o muerte del sujeto de experimentación.
En 1964 la Asociación Médica Mundial adopto la Declaración de Helsinki, esfuerzo de la comunidad médica para autorregularse, y forma la base de muchos de los documentos subsecuentes.
Consta de Principios Básicos y Principios Operacionales
Principios Básicos:
1. Respeto por el individuo
2. Derecho a la autodeterminación
3. Derecho a tomar decisiones
4. Participación del experimento al inicio y durante la investigación
5. El bienestar del sujeto debe preceder a los intereses de la investigación y la sociedad
6. Las consideraciones éticas deben salir del análisis de las leyes y regulaciones
Principios Operacionales:
1. Investigaciones basado en conocimientos cuidadosos del campo científico
2. Evaluación de riesgos beneficios
3. Probabilidad razonable de beneficios en la población estudiada
4. Conducción por expertos
5. Uso de protocolos adecuados, sujeto a revisión a ética independiente y supervisión por comité convocado
6. Protocolos con temas éticos y relacionado con la Declaración de Derechos
1966 LA Asamblea General de las Naciones Unidas adopto: Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos:
Art. 7: Nadie será sometido a torturas ni a penas ni tratos crueles, inhumanos, degradante. En particular nadie será sometido sin su libre consentimiento a experimentos médicos o científicos.
Declarando que las investigaciones deben respetar: La protección de los derechos y el bienestar de todos los sujetos humanos de experimentación científica
1982 el Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas (CIOMS) y OMS publicaron: Propuestas de normas éticas internacionales para las investigaciones biomédicas en sujetos humanos. Indica cómo se pueden aplicar eficazmente los principios éticos que deben regir las investigaciones biomédicas
En el plano jurídico se prohíbe la experimentación terapéutica en cualquier situación sin consentimiento libre
Se deben cumplir los siguientes principios en la Investigaciones biomédicas:
Respeto por la personas: Este principio se basa concepción occidental del individuo como autónomo, capaz de dar forma y sentido a su vida con planes y objetivos (1).Este principio incluye: respeto de los derechos de la persona y respeto por su bienestar
Principio de beneficencia: busca el bienestar de la persona y beneficio de la persona: Prevenir el mal o daño, contrarrestar el daño , hacer y fomentar el bien
Principio de justicia: responde a la pregunta de quien recibirá el beneficio de la investigación y quien sufrirá los perjuicios, aquí hablamos de a quien se recluta o selecciona y a quién se distribuye los beneficios
Investigación biomédica en América Latina
Cada País tiene sus propias características, de marginalidad, pobreza e inequidad, con escenarios distintos en relaciona los países desarrollados, los accesos de salud son mayores en aquellos, los presupuestos para estas investigaciones son escasas en los países latinoamericanos, pero las normas de ética para estas investigaciones se deben adecuar a las leyes de cada país.
Con estas diferencias en los países latinoamericanos, se debe tener en cuenta si los tres principios mencionados, son conocidos y aplicados en los países latinoamericanos
Los individuos forman parte de la sociedad latinoamericana comparten un esfuerzo común y no tienen la individualidad, por lo que no se vela el interés del individuo sino el de la sociedad y la investigación se encaja en los metas que trazo la sociedad.
Para que puedan participar los sujetos en las investigaciones deben tener la capacidad de entender y discernir la investigación y el contrato al participar de la investigación, pero conociendo el nivel de educación de la población latinoamericana, este concepto no se aplica en su totalidad, además que la mayoría de las investigaciones son realizadas por extranjeros, y la población tiene el concepto de que “lo extranjero es mejor”
De todas maneras las investigaciones que se realizan y realicen en Latinoamérica deben estar normadas y debe existir un compartir de la investigación entre extranjeros y locales para producir beneficios a los enfermos y la sociedad.
Bibliografía.
C IOMS- OMS, Normas éticas internacionales para las investigaciones biomédicas con sujetos humanos. OPS Oficina sanitaria oficina regional de OMS. Publicación científica Nº 563 Washington D.C. U.E.A .1996.
Diana Serrano LaVertu y Ana María Linares. Principios éticos de la investigación biomédica en seres humanos : Aplicación y limitaciones en América Latinas y el Caribe. Publicación Científica Nº 527. Bioética Temas y Perspectivas .OMS. Washington. 1990
OPS. Experimentos humanos, La Salud y los derechos humanos. Aspectos Éticos y morales. Publicación científica Nº 574. OPS – OMS Washington D.C. 1999


TEMA 8
TRASPLANTES

Dr. Ariel Ayllón Alarcón

1.- INTRODUCCIÓN
Hay enfermedades que hacen que uno o más de los órganos vitales de una persona (riñones, corazón, pulmones, hígado, páncreas o intestinos) dejen de funcionar, es lo que se denomina una insuficiencia terminal del órgano. A menos que se pueda sustituir el órgano, o por lo menos reemplazar su función, la persona afectada muere. En el caso de la insuficiencia terminal de riñón, por ejemplo, el trabajo de los riñones es decir, la eliminación del exceso de agua y productos de desecho del cuerpo puede ser asumido por una técnica denominada diálisis renal. Esta técnica salva la vida de la persona pero requiere mucho tiempo y suele impedir que el paciente en diálisis recupere su plena forma. En el caso de una insuficiencia terminal del intestino, se puede mantener a la persona con vida, mediante la alimentación artificial, pero, una vez más, se trata de un sistema complicado que interfiere considerablemente en la vida normal del paciente. En la actualidad no existe ningún sistema artificial satisfactorio que reemplace la función del corazón, los pulmones o el hígado a largo plazo.
El tratamiento preferente para una gran parte de las personas con insuficiencia terminal de órganos importantes, es el trasplante de órganos. Los programas de trasplante de órganos para personas con insuficiencia terminal de los riñones, el corazón, los pulmones o el hígado se vienen realizando desde hace muchos años y hoy tienen un alto índice de éxito. Un número cada vez mayor de trasplantados sigue viviendo veinte años después de la operación, y la mayoría sobrevive por lo menos cinco años. Más recientemente se han venido realizando trasplantes de intestino y de páncreas. También se conocen bien los trasplantes de tejidos como la córnea y el hueso.
En la gran mayoría de operaciones de trasplante se usan los órganos de personas que han muerto. Pero también una persona en buen estado de salud puede donar uno de sus riñones, y en casos poco comunes, se ha dado parte del hígado, pulmón o intestino, sin que ello representara un riesgo inaceptable para la propia salud del donante.
Los avances de la Medicina hacen ahora posible la sustitución de varios órganos lesionados. Se han hecho grandes adelantos para solucionar los problemas de trasplante de hígado, páncreas y corazón. En España se realizaron en 1965 los primeros trasplantes de riñón y en 1984 se iniciaron los de corazón e hígado. Por tanto, desde hace más de veinte años, el número de personas que viven gracias al trasplante de un órgano vital es cada vez mayor.
2. DEFINICION DE TRASPLANTE
Procedimiento por el cual se implanta un órgano o tejido procedente de un donante a un receptor. Existen dos grandes grupos de manera general: los trasplantes de órganos (riñón, hígado, pulmones, páncreas, córnea, corazón, hueso, tubo digestivo, etc.) y los de tejidos (médula ósea, células endocrinas). Mientras que los primeros precisan de intervenciones quirúrgicas complejas, procediéndose a los empalmes vasculares y de conductos excretores entre otras estructuras, en los de tejidos el procedimiento es simple, inyectándose las células suspendidas (en el de médula ósea se inyectan en el torrente sanguíneo) y dejando que éstas implanten en sus lugares de destino.
3. TIPOS DE TRASPLANTE
Hay diferentes tipos de trasplantes según la relación genética entre el donador y el receptor.
Según el donador es el tipo de trasplante, que puede ser:
Autotrasplantes o autoinjertos
Son aquellos en los que el donador y el receptor son la misma persona, es decir que se utiliza tejido de un lado del cuerpo, para colocarlo en otro o que se guarda para utilizarlo en el momento en que se necesite. Entre estos tejidos están la piel, músculos, huesos, sangre o médula espinal.
Isotrasplantes
Son los que se realizan entre gemelos idénticos o univitelinos, es decir, cuando el donador y el receptor son genéticamente idénticos y se pueden realizar con todos los órganos y tejidos trasplantables.
Homotrasplantes o alotrasplantes
Son cuando el donador pertenece al mismo sexo y/o raza, pero que genéticamente son diferentes.
Heterotrasplantes o xenotrasplantes
Son los que se realizan entre personas genéticamente diferentes, de ambos sexos, de cualquier raza o en los que se utilizan órganos artificiales.
4. RECHAZO DE TRASPLANTES
Desde el comienzo, han habido dos grandes obstáculos para el éxito de los programas de trasplantes de órganos, y ambos pueden describirse con un solo término: "rechazo". La mayoría de las veces, dicho término se aplica metafóricamente al obstinado rechazo de un organismo a aceptar como propios órganos de otro; y debido a que tales reacciones son puramente somáticas, psicológicas y químicas, sus soluciones se buscan y algunas veces se encuentran en el laboratorio. En el uso ordinario, sin embargo, "rechazo" implica volición, una respuesta psicológica que no es posible solucionar por medios mecánicos. Menos metafóricamente, entonces, dicho término puede ser utilizado para describir el fracaso de la mayoría de nuestra población en aceptar ser donantes de órganos, lo cual ha causado una disparidad cada vez mayor entre la oferta y la demanda que mortifica a los auspiciadores de los programas de trasplantes de órganos. Especialmente mortificante es la reluctancia de los varones jóvenes (el campo óptimo para la cosecha de órganos) a comprometer partes de sus cuerpos para una donación póstuma, o que los familiares que les sobreviven no permitan su desmembramiento después de muertos.
Tratar con este tipo de "rechazo" requiere realizar cambios no en el soma sino en la psiquis. Esto ya sería de por sí difícil en cualquier caso, pero el factor que lo hace especialmente problemático es que las actitudes subyacentes a él están enraizadas en temores y fantasías que están por debajo del nivel de la conciencia total. Clara evidencia de esto se puede hallar en el hecho de que en los sondeos, un 90 por ciento de la misma población que se resiste al trasplante de órganos indica no sólo una voluntad, sino incluso una avidez de hacerlo. Es decir, existe una enigmática contradicción entre lo que la mayoría de los donantes potenciales dicen que están dispuestos a hacer y lo que terminan haciendo.
5. DEFINICION DE DONANTE.
Acto jurídico entre vivos por el cual una persona (donante) transfiere a otra (donatario) gratuitamente el dominio sobre una cosa y el donatario acepta.
La donación es uno de esos conceptos tan fáciles de comprender en su esencia como difíciles de delinear en sus contornos precisos.
La dificultad reside en la circunstancia de que no todo acto a título gratuito es donación.
No lo son los actos de última voluntad ni tampoco numerosas liberalidades realizadas entre vivos que quedan excluidas del concepto jurídico de donación.
Se ha circunscripto el régimen legal de las donaciones a ciertos actos respecto de los cuales se considera particularmente importante proteger al donante.
6. TIPOS DE DONANTE.
DONANTE VIVO: Debe estar emparentado familiarmente con el receptor para evitar el comercio de órganos.
DONANTE CADÁVER: Debe tener una edad a ser posible de menos de 65 años si es donante se le extraerán los órganos necesarios y si no con el consentimiento de los familiares pueden extraerlos también.
7. ETICA Y TRASPLANTES.
Históricamente, en los trasplantes aparecen problemas éticos agrupados en las diferentes etapas por las que han pasado, estas son:
• Experimental: (1950-1975) se plantean todos los problemas éticos de la experimentación en humanos. Los criterios de Muerte Encefálica (ME) no estaban bien establecidos y tampoco legislados, considerándose mutilación la obtención de órganos de donantes vivos.
• Consolidación: (1975-1983) se legisla acerca de la ME y sobre las condiciones que debe cumplir el proceso de donación y trasplante, mejore la relación riesgo-beneficio y costo-beneficio, pero se cuestiona la aplicación de fondos para los mismos.
• Terapéutica: aparece la ciclosporina A y con ella una efectiva inmunosupresión, comenzando a ser el trasplante un tratamiento efectivo. Los problemas planteados tienen que ver con la escasez de recursos y órganos, los altos costos y la justa elección de los receptores.
El problema ético en estos casos no difiere sustancialmente con la experimentación en humanos en general, existen 3 principios fundamentales:
• El procedimiento debe estar avalado por una importante investigación científica.
• Los cirujanos y demás integrantes del equipo deben tener experiencia suficiente.
• La institución donde se practiquen debe tener reconocimiento por su trayectoria científica y ética.
Para la valoración ética de la extracción de órganos en muertos cerebrales existen tres posiciones fundamentales según la interpretación del estado ontológico del muerto cerebral.
1. Se trata con seguridad de un vivo, no está permitido la extracción.
2. Está muerto con certeza, está permitido la extracción.
3. No hay certeza de que viva o esté muerto, la extracción parece -según principios éticos de tutorismo- más bien no permitido.
8. LA RELIGION Y EL TRASPLANTE.
Muchas veces se pregunta si las religiones permites los trasplantes o están a favor de ellos, los ejemplos que damos son de religiones que ocupan un mayor porcentaje en la sociedad:
Católicos.- ven la donación de órganos y tejidos como un acto de caridad y amor. Trasplantes son aceptados por el Vaticano desde el punto de vista moral y ético. El Papa Benedicto XVI declaró "Ser un donante de órganos es un acto de amor hacia alguien necesitado, hacia un hermano en dificultad. Es un acto libre de amor, el que cada persona de buena voluntad puede hacer en cualquier momento y para cualquier hermano. En cuanto a mí, estoy de acuerdo dar mis órganos a quién los necesite."
Cristianos.- La iglesia cristiana estimula la donación de órganos y tejidos, expresando que el individuo fue creado para la gloria de Dios y para compartir su amor. La siguiente resolución adoptada en 1985 por la Asamblea General fomenta entre “….miembros de la Christian Church (Disciples of Christ) a registrarse como donantes de órganos, y a apoyar mediante la oración a las personas que reciben el trasplante de un órgano.”
Evangelistas.- no se oponen a la donación de órganos y tejidos. Cada iglesia es autónoma y deja la decisión de donar al individuo.
Testigos de Jehova.- Tienen la creencia que donar es materia de decisión individual. Siempre se asume que ellos se oponen a la donación por su creencia en contra de la transfusión de sangre. Sin embargo, esto solo quiere decir que toda sangre debe eliminarse de los órganos y tejidos antes de hacerce un trasplante. Tampoco se acepta que el donante del órgano reciba sangre como parte de su recuperación a consecuencia de haber donado el órgano.
9. LEY BOLIVIANA PARA TRASPLANTES
Es la norma jurídica que regula la práctica de los trasplantes en nuestro país.
La Ley de Trasplantes, para su aplicación, tiene una reglamentación bien específica. Además los profesionales involucrados en la práctica de los trasplantes cuentan con un Manual para la aplicación rigurosa de procedimientos y técnicas.
Todos estos instrumentos tienen la finalidad de asegurar las mayores garantías a los donantes y a los receptores de órganos, a fin de que estos últimos puedan reintegrarse plenamente a la sociedad.
La legislación boliviana da preferencia a la donación de órganos por parte de personas fallecidas con muerte cerebral, tomando en cuenta su voluntad en vida pero respetando siempre la opinión de los familiares.
Cada año se pierden en Bolivia miles de vidas porque no hay suficientes donaciones de riñon, hígado y corazón. El número de personas que cada año requieren de un trasplante de riñon para poder salvarse alcanza por lo menos a 300.
10. TRAFICO DE ORGANOS.
El tráfico de órganos, como actividad ilícita, antijurídica, culpable y punible, reúne los elementos necesarios para ser considerado como delito, los criterios básicos para ser tipificado en el Código Penal, debiendo también incorporarse todas las particularidades necesarias identificadas en la investigación de la legislación comparada.
BIBLIOGRAFIA
Norrie Mc. Trasplantes en humanos: . Internacionales y comparativas Leyes Quarterly 1985; 34(3): 442-53.
Pace RA. Aspectos éticos de los trasplantes de órganos. En: Cuadernos del programa regional de bioética. OPS-OMS 1997; 4: 149-70.
Carral Novo JM, Parellada Blanco JC. Organización del rescate de órganos para trasplante. Rev Cubana Cir 2001; 40(1): 78-80.
Calne RY. Introducción e historia de los trasplantes de tejidos. En: Trasplante Renal. Editorial Acribia. Zaragoza. España. Edición española 1965: 13.
Tema 10
MODELOS DE RELACION MEDICO PACIENTE
INTRODUCCION
Durante los últimos años se observa una clara evolución en los respectivos roles del enfermo y el médico. Así, el enfermo, globalmente, actualmente presenta un nivel cultural más elevado, mayor acceso a la información médica (Internet) y una mayor capacidad de comprender y elegir entre las distintas alternativas diagnósticas y/o terapéuticas.
Por ello, cada vez más el médico no va a decidir y a ejecutar sin más lo que, desde su punto vista, es lo mejor para el paciente (paternalismo médico) sino que deberá exponer de la manera más clara y comprensible las ventajas e inconvenientes de las distintas opciones terapéuticas y cuál es su recomendación, siendo el enfermo quien toma la decisión final (autonomía del paciente).
CONCEPTO
La relación médico paciente es una relación humana específica, ya que tiene un objetivo determinado: mejorar el estado de salud del paciente-usuario.
Se trata de una relación asimétrica, ya que el médico dispone de 1) Conocimientos técnicos tanto médicos como sobre el funcionamiento del sistema sanitario. 2) Posición social elevada (relativamente) 3) Cierto poder carismático basado en el prestigio de la medicina. El paciente únicamente controla su plan de vida (cuales son sus objetivos vitales, como quiere y/o puede afrontar la enfermedad) y controla el modo en que expone la enfermedad.
La relación tiene, por tanto,
a) Un componente técnico, que es extremadamente importante. Así, la formación influye en la calidad de la asistencia y los médicos con mejores notas durante la licenciatura dan asistencia de mayor calidad (Tamblyn R et al. Association Between Licensing Examination Scores and Resource Use and Quality of Care in Primary Care Practice JAMA. 1998;280:989-996).
b) Un componente personal o humano, que depende de modo importante de la capacidad del médico de “ponerse en el lugar del paciente o empatía:”. Así, para realizar un tratamiento con éxito es determinar que prefiere el paciente, cuales son sus planes vitales, que grado de información desea tener, etc . y en segundo lugar, la capacidad de generar confianza: conseguir que el paciente sepa que: 1) que el médico que lo atiende posee los conocimientos adecuados para su caso. 2) los conocimientos del médico van a utilizarse en su beneficio
Por tanto, para corregir la asimetría de la relación, el médico debe (Charles Fried, 1974):
1. Comunicar la información de manera inteligible y decir la verdad.
2. Respetar la autonomía y las decisiones del paciente.
3. Respetar la confianza del paciente y mantener el secreto médico.
4. Mostrar empatía, compasión y sensibilidad. Tener en cuenta la vulnerabilidad del paciente.
De hecho los aspectos de la relación que valora el paciente son, en tres grupos: la comunicación, el impacto personal y la profesionalidad: (J R Soc Med. 2003 April; 96(4): 180–184.)
Comunicación Impacto personal Profesionalismo
Escuchar Cuidado Integridad profesional
Explicar Comprensión Competencia como médico
Tranquilizar Valoración del contexto
Seguir la evolución Agradar mutuamente
Lenguaje inteligible Respeto
Respecto de las fases del acto médico, distinguimos:
a) Presentación
b) Motivo de consulta
c) Interrogatorio
d) Exploración física
e) Comentarios y conclusiones iniciales. Diagnóstico inicial
f) Exploraciones complementarias
g) Tratamiento inicial
h) Diagnóstico
i) Pronóstico
j) Tratamiento
MODELOS DE RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE

Modelo de Laín Entralgo

Pedro Laín Entralgo, eminente médico español autor de libros tradicionales como “La relación médico enfermo” y “Enfermedad y Pecado”, no analiza esta relación desde la comunicación humana tal como la definimos en el párrafo anterior: para él dicha relación consiste en un encuentro entre dos personas, una de ellas, el enfermo que necesita ser ayudado a recuperar su salud, el otro, el médico que está capacitado para brindar esta ayuda.

Plantea por lo tanto que esta relación está fundada genéricamente en lo que él llama el “binomio menester-amor”, en tanto que el fundamento específico tiene que ver con las características con las cuales se concreta esa necesidad de ser ayudado-ayudar. Por lo tanto, en esta concepción todo enfermo puede básicamente ser considerado como un carenciado y todo médico tiene como función satisfacer dicha carencia en un acto que primordialmente es afectivo, mientras que la forma en que ese encuentro se lleva a cabo es variable y depende de las circunstancias culturales, científicas y técnicas propias de cada época y de cada lugar.

Establece que en el desarrollo de la relación existen momentos a los que define como momento cognoscitivo, operativo,afectivo y ético religioso:

1-El momento cognoscitivo

Se refiere a la etapa del diagnóstico, que para este autor equivale al modo de conocer del médico.
El diagnóstico se realiza en el marco de una relación, que a su vez está inserta en una sociedad determinada. Por lo tanto, el autor se pregunta primero por la naturaleza de la vinculación que se establece entre el médico y el enfermo, que como todas las relaciones humanas puede ser objetivante o interpersonal. Explica que las relaciones duales o dúos, son objetivantes y se caracterizan porque las personas que las establecen lo hacen por un interés común pero exterior a cada uno de ellos. Un ejemplo es el de una sociedad para un fin determinado, un “negocio con partición de ganancias”.
Las relaciones diádicas o díadas, son interpersonales y el interés que convoca a los participantes es común e interno a cada uno de ellos, pertenece a su intimidad, tal como ocurre en la relación de la madre con el hijo, en la amistad y en el amor.
Laín Entralgo propone denominar a la relación médico enfermo como “cuasi diádica” porque compartiría algunas características con la díada, ya que el interés que une a ambos miembros de la relación es común y está representado por el deseo de la recuperación de la salud perdida, pero el que padece el problema es el enfermo y no el médico, es decir es interno para uno y está fuera del otro.
Considerando estas conceptualizaciones, cuando este autor define el momento cognoscitivo diciendo que el “diagnóstico médico es la configuración cognoscitiva de una relación cuasi diádica entre el médico y el enfermo”, quiere significar que el diagnóstico médico surge del encuentro y la interacción entre dos personas entre las que se establece una muy particular forma de relacionarse, sin olvidar además la cultura en la que ambas están inmersas. No es, por lo tanto, un acto individual del médico que con sus conocimientos científicos nombra, designa, enuncia padece una persona enferma, sino una interacción donde el concepto de salud y enfermedad de la época en que se vive todo lo impregna, interacción en la cual participan el enfermo con sus concepciones y emociones y el médico con las suyas, siendo la resultante dicho diagnóstico médico.

2-El momento operativo

Se refiere a la actividad terapéutica del médico que, como sabemos, no corresponde únicamente a la prescripción de los medicamentos sino que comprende todo su accionar, desde la escucha empática del inicio, hasta el saludo final. La acción terapéutica comienza cuando el paciente decide pedir la consulta, antes del encuentro propiamente dicho y no terminará hasta el alta. El momento del diagnóstico también es terapéutico. Laín Entralgo insiste también aquí, en la cualidad del hombre como ser social y plantea que es importante considerar el tratamiento como un acto social y el alta como un juicio, que devuelve al enfermo al seno de la sociedad con la designación de ser un hombre sano.

3-El momento afectivo.

Este autor plantea que existen tres formas de vinculación afectiva entre el médico y el paciente: la camaradería médica, la transferencia y contratransferencia y la amistad médica en sentido estricto.
En la camaradería médica, tanto el médico como el paciente, aspiran a solucionar la enfermedad y lograr la salud, pero con poco compromiso personal.
El paciente, si es curado, estará agradecido y vinculado afectivamente a su médico, aunque con poca profundidad, por el servicio que éste le prestó. En la amistad médica, lo característico es la confianza por la cual el paciente puede hacerle confidencias a su médico acerca de sus más íntimos pensamientos y emociones. Por parte del médico lo fundamental es la beneficencia, como intención de “hacer el bien” a su paciente, teniendo en cuenta que el bien buscado es la salud. La relación en este caso es tanto técnica como afectiva. En cuanto a la transferencia y contratransferencia, estos temas se tratan en el capítulo V (“Aspectos psicoterapéuticos de la relación médico-paciente”). Estos conceptos desarrollados por el psicoanálisis, se refieren en sentido estricto a los aspectos inconscientes de la relación psicoanalista-paciente. Por esta razón Laín Entralgo postula que el afecto involucrado es máximo en la transferencia, de menor intensidad en la amistad médica y mucho menos profundo e intenso en la camaradería médica.

4-También la ética y la religiosidad tiñen esta relación de un modo singular distinto para cada sujeto humano.

El autor postula que tanto lo ético como lo religioso son inherentes al hombre y por lo tanto en el hombre enfermo y en el médico relacionado con él, ambos aspectos también están presentes. Aunque en las rutinas cotidianas la ética se enmascara, nunca está ausente el carácter “moral” del acto médico, sea éste moral, inmoral o amoral. (Ver principios y reglas de la bioética).En cuanto al enfermo, el “para qué” de su deseo de estar sano, el considerar la salud como medio para vivir o como un fin en sí mismo, son evidencia de dicho carácter ético. Los médicos, como veremos al hablar acerca de los modelos de la bioética, se rigen por principios y normas en su trato con las personas que los consultan. Los momentos que describe Pedro Laín Entralgo, no deben concebirse como siguiendo una secuencia temporal, sino como un despliegue de diversos aspectos que a veces son simultáneos y otras sucesivos.

Modelo interaccional

Surge de una síntesis entre algunos postulados de la psicología social con los de las teorías de la comunicación. Las teorías de la comunicación en psicología, comenzaron a desarrollarse a finales de la década de 1960 sobre la base de la teoría matemática de las comunicaciones publicada por Shannon en 1948, aunque ya previamente se habían realizado trabajos sobre la transmisión de la información a grupos sociales.
Autores prominentes como Bateson G., Collins M., Watzlawick P.J., Rogers C., Ruesch K. y muchos otros sentaron las bases de diversos modelos de comunicación utilizados para comprender las relaciones humanas y específicamente las que se desarrollan entre el paciente y el médico o cualquier otro profesional del equipo de salud. Postulaban que la comunicación caracteriza básicamente a un sujeto humano que vive en sociedad y describían la existencia de tres modalidades comunicacionales: la intrapersonal, la interpersonal y la social.
Otro aporte de gran importancia consistió en sostener que la comunicación no es un acto de intercambio de información sino que constituye un proceso en el cual los sujetos involucrados se retroalimentan en un contexto que cambia de modo permanente. Se comprende, por lo tanto, que el proceso comunicacional en la relación entre el paciente y los profesionales de la salud es multidimensional.

Relaciones:

El concepto de rol que se incorpora y completa este modelo, fue en realidad el que la psicología social tomó en su momento del arte dramático y unió a la concepción de actitud y posición o status, de tal forma que el rol o papel corresponde a las actitudes de las personas según la posición que ocupan. Desde esta visión, las relaciones que se establecen entre las personas pueden ser clasificadas como:
• Complementarias: cada uno de los miembros desarrolla, funciones o actitudes que son asimétricas y que no compiten, ni se oponen, ni son contradictorias con las del otro, sino que, más bien, se articulan en una resultante común El control es desigual: uno de los miembros ejerce más control y el otro, menos. En el modelo médico clásico, el control lo ejerce el médico, el paciente acepta dicho dominio. Estas relaciones son estables, eficientes y predecibles. No se pierde tiempo negociando porque cada uno sabe cuál es su cuota de poder de decisión. Por otra parte, el miembro con menor poder queda sometido y está menos libre de ejercer su decisión y autonomía.

• Simétricas: en esta modalidad no existe la desigualdad. Las funciones tienen el mismo valor. La relación es de cooperación mutua. Ante cada cambio de situación debe redefinirse quién tiene el control. En medicina las relaciones entre profesionales suelen ser simétricas. Ello permite compartir ideas, responsabilidades y decisiones.

• Paralelas: son relaciones cuyos objetivos no son comunes. El control se transfiere permanentemente entre los participantes. Este tipo de relación puede virar entre ser complementaria y simétrica. Los miembros de la relación distribuyen el control en algunas áreas y lo comparten igualitariamente en otras. La relación médico-enfermera es un ejemplo de esta modalidad. La enfermera tiene pleno control en las áreas de cuidado y el médico en las decisiones diagnósticas y terapéuticas. Este tipo de comunicación es más flexible y con menor tendencia a los malentendidos. Entre los médicos, este modelo se da cuando el control se asume o se abandona en manos de un colega, según las circunstancias, como ocurre en los equipos multidisciplinarios o en la interconsulta.

El modelo interaccional propone el análisis de cuatro tipos de relaciones que considera las más trascendentes en medicina:
• La del médico con el paciente.
• La del médico con el familiar o con la persona que ocupe
• tal lugar.
• La de los profesionales del equipo de salud entre sí.
• La del enfermo con su familia o con la persona que ocupa un lugar significativo en su vida.


Modelo de Leary

Leary desarrolló un modelo de interacción humana recíproca en 1955, sobre la base de la observación empírica de los diversos acontecimientos que tenían lugar durante los tratamientos psicoterapéuticos que él efectuaba.Se trata de una propuesta de gran simplicidad y de fácil aplicación en medicina.

Modelo de Hollender

Se trata de un modelo centrado en las actitudes que tanto los médicos como los pacientes pueden adoptar en el transcurso de la enfermedad.

1. Este autor plantea que existen situaciones en las cuales el enfermo, por la gravedad de su estado se comporta, con conciencia o sin ella, con mayor pasividad, tal como ocurre en las urgencias, los comas, los cuadros confesionales, en la cirugía etc. En estas circunstancias el médico debe ser activo .El prototipo de este estilo relacional sería la relación entre la madre y el lactante.

2. Cuando la enfermedad es aguda, la forma adecuada es que el médico asuma la dirección del tratamiento con la cooperación del paciente, tal como ocurre en la relación padre-hijo.

3. En las enfermedades crónicas y en todas aquellas circunstancias en las que deba ponerse en funcionamiento una estrategia de rehabilitación, la forma más adecuada de llevar esto a cabo sería con una relación de participación mutua y recíproca según un modelo adulto-adulto.

Este modelo plantea que tanto el comportamiento del médico como el del paciente dependen del tipo de enfermedad que este último padezca, del momento evolutivo de la misma y de las particulares circunstancias que se estén atravesando

ANEXO
ESTATUTO ORGANICO DEL COLEGIO MEDICO DEPARTAMENTAL DE LA PAZ
CAPITULO III DE LA RELACIÓN MÉDICO – PACIENTE

Art. 9º Actuación del médico El médico debe proporcionar atención profesional a toda persona que la necesite, sin discriminación alguna.

Art. 10º Emergencia médica En caso de emergencia, ningún médico podrá negar su atención profesional.

Art. 11º Formas de relación
La relación médico – paciente se establece en los siguientes casos:
1. Por decisión espontánea y voluntaria del paciente y del médico
2. Por acción unilateral del médico en caso de emergencia .
3. Por solicitud de terceras personas.
4. Por compromiso de atención a pacientes de entidad pública o privada.

Art. 12º Obligaciones en el acto médico El médico está obligado a otorgar al enfermo consideración humana, brindándole su ayuda profesional y moral, respetando sus valores étnico culturales, temores y flaquezas.

Art. 13º Respeto al pudor El médico debe respetar escrupulosamente el pudor del paciente. En todo examen clínico o instrumental que realice, debe contar de preferencia con la presencia de personal auxiliar o un allegado del paciente.

Art. 14º Elección del médico La elección del médico es un derecho del paciente o de terceras personas según lo previsto en el artículo 12 numeral 3 de este Código, excepto en las instituciones que se rigen por sus propias normas. Asimismo la decisión de consultar a otro profesional debe ser respetada, debiendo el médico tratante, en ese caso, facilitar los documentos e información requerida.
Art. 15º Atención médica de calidad Es obligación del médico ofrecer al enfermo la mejor atención, con todos los conocimientos que estén a su alcance y recursos disponibles. Cuando esto no sea posible, debe informar de ello al paciente con veracidad y oportunidad.

Art. 16º Observancia legal La atención del paciente, en consultorio institucional o privado, se regirá estrictamente bajo las normas establecidas en los documentos legales pertinentes.

Art.17º Uso adecuado de exámenes y procedimientos médicos La realización de exámenes, tratamientos o procedimientos deben tener el justificativo científico necesario.

Art. 18º Observancia de la Praxis Médica y su implicancia legal El médico debe abstenerse de emplear tratamientos o técnicas cuyo manejo desconoce o para los cuales no está entrenado, siendo responsable de los daños que cause por negligencia, imprudencia, impericia, ignorancia o abandono

Art. 19º Observancia de las normas y protocolos médicos El médico debe utilizar recursos diagnósticos y terapéuticos suficientemente probados y autorizados por normas y protocolos vigentes ; en circunstancias excepcionalmente graves, podrá utilizar un procedimiento alternativo no protocolizado siempre que represente la única posibilidad y esté respaldado por una junta médica constituida por no menos de tres profesionales médicos , bajo consentimiento informado y firmado por el paciente, sus familiares o apoderado legal.

Art. 20º Información al paciente Para la aplicación de cualquier método diagnóstico o terapéutico , es necesario informar al paciente, sus familiares o apoderado legal y registrar en la historia clínica correspondiente.

Art. 21º En situaciones de riesgo o mutilación Para efectuar un procedimiento médico o quirúrgico que entrañe mayor riesgo que el habitual o signifique mutilación, el médico debe contar con el consentimiento informado y escrito del paciente, sus familiares o apoderado legal.

Art. 22º Acto médico en casos especiales En caso de inconsciencia, incapacidad mental o legal del paciente, el médico debe requerir el consentimiento informado y escrito de sus familiares o apoderados en presencia de testigos. En situaciones de urgencia y ausencia de responsables, debe contar, en lo posible, con la opinión autorizada y aquiescencia escrita de uno o dos médicos llamados en consulta.

Art. 23º Acto médico en casos de emergencia Si en un caso de emergencia no fuera posible obtener el consentimiento informado, siempre y cuando el criterio clínico aconsejara un tratamiento médico o quirúrgico inmediato, el médico quedará facultado para realizar el tratamiento, sin necesidad de autorización alguna

Art. 24º De la Competencia del médico en casos de emergencia Independientemente de su función o especialidad, el médico debe prestar auxilio inmediato al enfermo en peligro. El acto médico en este caso, no implica responsabilidad por resultados no deseados.

Art. 25º El acto médico en menores de edad No se realizará acto médico alguno a pacientes meno res de edad sin previo y pleno consentimiento informado y escrito de los padres o tutores; a menos que la vida o que el futuro del paciente exija intervención de urgencia.

Referencia:

1. Pedro Laín Entralgo. La Relación Médico Enfermo. Historia y Teoría.pág.19. (pág 16 de la copia de WORD)

2. Estatuto orgánico y reglamentos del colegio médico de Bolivia Trinidad - Beni 2008 pags:269 a 272 Código de ética y deontología médica.

3. Pedro Laín Entralgo. La Relación Médico Enfermo. Historia y Teoría.pág.19. (pág 16 de la copia de WORD)

4. “El significado de “enfermedad”, depende menos del juicio del médico que del juicio del paciente y de las concepciones prevalentes en la cultura contemporánea...” Karl Jaspers. Psicopatología General. 1963. (pág 17 de la copia de WORD)

5. Jorge. Introducción a la Psicología Médica. Edit. Promed. BsAs. 1985.(pág 19 de la copia de WORD)

6. King, I.M. (1981). A theory for nursing :Systems, concepts,process. New York. Wiley. (pág 22 de la copia
7. de WORD).

8. Declaración Universal de Derechos Humanos.Asamblea General de Naciones Unidas. 1948.(pág 25 de WORD)

9. Juramento según Declaración de Ginebra.Adoptado por la Asociación Médica Mundial. 1948. .(pág 25 de WORD).

10. Beauchamp Tom y Childress James. Principles of Biomedical Ethics. Oxford University Press. 1979. (pág 26 de WORD).

11. Si te juzgas pagado lo bastante con la dicha de una madre con una cara que sonríe porque ya no padece,
12. con la paz de un moribundo a quien ocultas la llegada de la muerte...” . Consejos de Asclepio(Esculapio) 128-56
13. aC. Dios mitológico griego de la Medicina. (pág 26 de WORD)

14. “Guardaré secreto acerca de lo que oiga o vea en la sociedad y no sea preciso que se divulgue, sea o no del
15. dominio de mi profesión, considerando el ser discreto como un deber en semejante caso”. Juramento Hipocrático.(pág 27 de WORD)

16. Código de Etica para el Equipo de Salud. AMA. 2.001- (pág 27 de WORD)

17. Hughes J.Denial in cancer patients. In Stoll B.A. Coping with cancer stress.Chapter 7: 63-69 . Martinus Nijhoff Publishers. Netherlands.1986 . (pág 31 de WORD)

18. Jones J.S.Telling the right patient. British Medical Journal, 1981; II: 291-293. (pág 31 de WORD)

19. Cassileth B.R,, Zupkis R.V., Sutton-Smith K., March V. Information and participation preferences among cancer patients. Annals of Internal Medicine; 1980, 92: 832-836. (pág 31 de Word)

20. Stoll B.A. Faith only belongs in churches? .In Stoll B.A. Coping with cancer stress. Chapter 1. Martinus Nijhoff
Publishers . Netherlands. 1986.(pag 32 de WORD

Tema 11
BIOÉTICA EN BOLIVIA
Dra. Roselynn Cadima Balderrama
INTRODUCCIÓN
En Bolivia los problemas relacionados con la no importancia de la revisión y la deficiencia ética de los protocolos se centran en la escasez de los comités de ética de la investigación. Por otra parte, además de la inadecuada educación bioética de los miembros de estos comités, existe un desconocimiento de la bioética como materia esencial en la formación profesional del investigador.
HISTORIA EN BOLIVIA
No hay registro de actividad bioética en Bolivia sino a partir de 1991, cuando el sacerdote Jesuita Miguel Manzanera propone a las autoridades de Univ. Católica Boliviana la creación de un Centro de Bioética. En la misma época, José Maria Alvarado, Luis Hurtado Gómez, Javier Luna Orosco y otros, se interesan por la signi y alcances de la bioética clínica, al elaborar los primeros borradores de la Ley del Ejercicio Profesional Médico, como una necesidad para la prevención de la llamada “Mala Práctica Profesional”.
LA INVESTIGACIÓN EN BOLIVIA
Bolivia se ha beneficiado con los avances de la biotecnología, producto de la investigación tecnocientífica. Las poblaciones vulnerables necesitan que los comités les brinden las condiciones de protección que no limiten su capacidad y libertad de consentimiento.
LEGISLACIÓN BOLIVIANA
La nueva Constitución Política del Estado, promulgada el 7 de febrero de 2009, establece que:
• "Es responsabilidad del Estado promover y garantizar el respeto, uso, investigación y práctica de la medicina tradicional, rescatando los conocimientos y prácticas ancestrales desde el pensamiento y valores de todas las naciones y pueblos indígenas originarios campesinos” (Art. 42.I).
• Ninguna persona será sometida a intervención quirúrgica, examen médico o de laboratorio sin su consentimiento o el de terceros legalmente autorizados, salvo peligro inminente de su vida (Art. 44.I).
• Ninguna persona será sometida a experimentos científicos sin su consentimiento (Art. 44.II)"(2).
El Código de Ética y Deontología Médica de 2004 (artículo 103) menciona la necesidad de que los protocolos sean aprobados por un Comité de Investigación los mismos que todavía no existen.
La velocidad del avance tecnocientífico de la investigación con seres humanos, desafía a la Biótica en Bolivia. Según Diego Gracia, resulta imposible "compaginar ciencia y vida evitando que haya conflictos", pero sí promover una "visión responsable", lo que se puede interpretar como tener un diálogo fructífero que ayude a mejorar la vida del hombre.
LA REALIDAD SOCIOCULTURAL Y LA INVESTIGACIÓN
¿Cómo se puede hablar de protección de la persona humana, sujeto de la investigación, sin considerar el ambiente en que vive? En Bolivia la pobreza y la violencia degradan el valor de la vida. Sin embargo, la tarea de la bioética es educar para la paz, para defender el derecho a la vida y promover el progreso. Presentar un proyecto de investigación que ofrezca como recompensa un poco de comida o un poco de dinero es suficiente para atraer la participación de gente pobre. No obstante, los comités de ética pueden identificar las poblaciones vulnerables y velar por su protección y bienestar y el Estado crear leyes que concuerden con las pautas internacionales.
Aunque la interdisciplinariedad de la bioética hace que sea posible incorporarla en cualquier campo de estudios, en Bolivia no se la reconoce como materia importante y esencial en el campo académico. La calidad de la bioética demanda un espacio único dentro de los programas de formación en investigación con seres humanos.
El estudio de los comités de ética de la investigación refleja el estado de la bioética en Bolivia, porque pregunta sobre el nivel de preparación de los miembros y los principios básicos que se deben seguir en la evaluación de protocolos y ensayos clínicos.
LOS COMITÉS DE ÉTICA DE LA INVESTIGACIÓN
El promedio de miembros que conforman el comité es de siete, que se reúnen por lo menos una vez al mes. Pocos comités informan de la presencia de miembros legos durante las reuniones. No se define la forma de tomar decisiones, tampoco es claro qué cargos tienen los miembros.
La mayoría de los comités fueron establecidos entre 2003 y 2008. Sobre la figura legal que los crea, solo tres instituciones gozan de resolución ministerial y el resto resoluciones institucionales o algún manual de la organización.
En cuanto a las actas, se observan discrepancias entre las instituciones que reportaron tener comités y los que disponen de actas de las reuniones.La mayoría de las instituciones no informa sobre los protocolos evaluados, a causa de la falta de registros.
Algunos no tienen regularidad de las reuniones, asistencia de los miembros y múltiple conformación del Comité; otros, la escasa disponibilidad de tiempo para evaluar proyectos y serias dificultades de financiamiento para el funcionamiento del Comité.
Los miembros son en su mayoría profesionales y con muchas responsabilidades. Los problemas indicados se vinculan estrechamente con las mismas funciones que se van realizando y que no permiten dedicar más tiempo a la evaluación de protocolos ni a las reuniones. Hay incertidumbre en cuanto a la ejecución de funciones como comité evaluador, problema que sólo se podrá solucionar con una buena formación de los miembros.
LA FORMACIÓN BIOÉTICA DE LOS MIEMBROS
Los miembros de los comités adquirieron su formación en bioética de varios modos: asistencia a congresos de bioética, seminarios, Internet, entre otros.
Es importante indicar que se han realizado cuatro congresos bolivianos de Bioética después del nacimiento del "Comité Impulsor de Ética y Bioética, el 7 de septiembre de 2000. El Primer Congreso Boliviano de Bioética tuvo lugar en 2001, durante la realización se formaron los comités departamentales de bioética...". El segundo Congreso se realizó en 2003; el tercero en 2005 y el cuarto en marzo de 2008.
Una serle de problemas en las instituciones reflejan la necesidad de que los directores reconozcan la importancia de la participación de los miembros de comités en estos encuentros. El estudio revela mucho interés en tener vínculos con otras instituciones para formar grupos cooperativos institucionales en ensayos clínicos y nutrir las propias experiencias. La conformación de vínculos puede ser un instrumento para una colaboración estrecha, que quiebre la competividad y la indiferencia que impide el avance de la bioética en el país.
DIFERENCIAS ENTRE LOS COMITÉS
Los resultados muestran un grado de confusión respecto de la diferencia entre un comité de ética de la investigación y otros comités. Es necesario educar para que estos conceptos se clarifiquen. El trabajo de la evaluación de los protocolos es una tarea exigente; por lo tanto, es importante no saturar a los comités de ética de la investigación con otras tareas que correspondan a otra clase de comités. Confundir su rol puede repercutir en la calidad de la evaluación y el posterior seguimiento de los proyectos.
EL REGLAMENTO SOBRE LA INVESTIGACIÓN
El actual Código de Salud se refiere a la protección del sujeto de la investigación en el Decreto Ley Nº 15.629 de 18 de julio de 1978 (Artículos 147 y 148). Igualmente, el Código de Ética Médica del Colegio Médico de Bolivia dedica unos artículos a la investigación biomédica y reconoce su importancia y la necesidad de seguir normas y pautas nacionales e internacionales sobre la investigación en seres humanos.
LA REVISIÓN ÉTICA
Algunos piensan que el mismo investigador debe evaluar sus propios proyectos, pero el peligro mayor es el de la omisión de sus propios errores éticos.
INSTITUCIONES DE BIOÉTICA EN BOLIVIA
Se tiene el COMITÉ NACIONAL DE BIOÉTICA (CNB) que nace el 7 Septiembre de 2000, INTITUTO DE BIOÉTICA DE LA CATÓLICA BOLIVIANA de la ciudad de Cochabamba, que nace el 6 de Noviembre 1992 y de la ASOCIACIÓN BOLIVIANA DE BIOÉTICA, DERECHO GENÉTICO Y BIOTECNOLOGÍA (ABIODGE) 2003. Con distintas funciones desde la realización de cursos, congresos, foros, seminarios, otras promueven el dialogo interinstitucional.
REALIDAD DE LA BIOÉTICA EN BOLIVIA
Hay una carencia en el conocimiento de cómo proteger a la persona humana en la investigación. Existe una tendencia negativa que indica la casi ausencia o el inadecuado funcionamiento de los comités. No se diferencian los comités de ética de la investigación de otros comités.
La falta de financiamiento y de apoyo a los comités limita la participación de los miembros, los cuales deben reunirse en su tiempo libre y buscar la manera de cubrir los gastos implicados en su organización y funcionamiento. Además de una insuficiencia en la formación bioética de los miembros, no se conoce la existencia de normas que regulen la investigación en seres humanos en Bolivia.
NECESIDADES
Se debe iniciar un diálogo interinstitucional que ayude a buscar una manera eficaz y seria de implementar comités de ética de la investigación, tomando como modelos los comités existentes. "En Bolivia será necesario impulsar niveles académicos formales y, hasta el presente, ninguna universidad ha mostrado interés en hacerlo", afirmación que se debe tomar en serio y buscar respuestas concretas.
Es necesario avanzar en el conocimiento de las normas y guías internacionales sobre la investigación en seres humanos, a partir de las cuales se elaboren normas nacionales que puedan guiar la investigación en Bolivia. Las instancias indicadas para la tarea son: el Comité Impulsor de la educación en Bioética, el Ministerio de Salud y el Gobierno Nacional.
Es indispensable contar con un organismo que pueda acreditar a los comités y asegurar su conformidad con los reglamentos internacionales y nacionales, además de tener un reglamento nacional sobre la protección de sujetos de la investigación biomédica y psicosocial. El Ministerio de Salud debe preocuparse por difundir la existencia de reglamentos y leyes referentes al tema.
Una mayor colaboración interinstitucional y generosidad al compartir conocimientos y materiales. Considerando la importancia de la educación en bioética, es menester que las autoridades asignen fondos para el proyecto y no esperar que las personas aporten sus propios recursos para este fin.
BILIOGRAFÍA
1. Lolas F, Quezada A. Pautas éticas de investigación en sujetos humanos: nuevas perspectivas. Santiago de Chile: Programa Regional de Bioética OPS/OMS; 2003: 85-90.
2. Constitución Política del Estado de Bolivia. Promulgada el 7 de febrero de 2009. La Paz: Librería Editorial MULTI; 2009. [
3. Código de Salud. Decreto de Ley Nº 15.629 de 18 de julio de 1978. U.P.S. La Paz (Bolivia); 2005. [
4. Gracia D. Profesión médica, investigación y justicia sanitaria. En: Ética y vida, 4. Santa Fe de Bogotá: El Búho; 1998.
5. Luna Orosco J. La bioética en Bolivia: antecedentes y proyecciones. En: Pessini L, De Barchifontaine C de P, Lolas F. (coords.) Perspectivas de la Bioética en Iberoamérica. Santiago de Chile: Programa de Bioética OPS/OMS; 2007.
6. Estatuto Orgánico del Colegio Médico de Bolivia, 2004. Disponible enhttp://www.colegiomedicodebolivia.org.bo/documentos/ESTATUTO_ORGANICO.pdf, último acceso en mayo 5, 2010.
7. Elizabeth C. Zwareva Mashir. Los comités de Bioética en Bolivia. Acta Bioethica 2010; 16(1): 87-97

Tema 12

COMITÉ DE BIOETICA MÉDICA NACIONAL Y
CODIGO INTERNACIONAL DE ETICA MÉDICA
Dra. Elva Espejo
ANTECEDENTES
El notable desarrollo de la Bioética en el mundo contemporáneo, así como los dilemas bioéticos que se plantean, determinan que Bolivia como país, deba incorporarse al análisis de esta temática. Por estas razones nació el Comité Impulsor de Ética y Bioéticaen el Ministerio de Salud y Previsión Social, en la ciudad de La Paz, contando con la cooperación técnica de la Organización Panamericana de la Salud y Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), donde se firmó el ACTA DE CONFORMACION del“COMITÉ IMPULSOR DE ETICA Y BIOETICA DE BOLIVIA”.En actual vigencia- núcleo de lo que sería el Comité Nacional de Bioética (CNB), cuenta con acta de Fundación y conformación del “7 de septiembre de 2.000”, gozando al momento del apoyo y participación activa de la OPS/OMS para la realización de sus actividades y cuenta con el reconocimiento internacional del Programa Regional de Bioética dependiente de la División de Salud y Desarrollo Humano de la OPS/OMS, a más de pertenecer a la Federación Latinoamericana de Bioética.
A objeto de construir una instancia de asesoría, promoción, formación, investigación, y vigilancia de los principios de ETICA Y BIOETICA que desarrolle y genere cultura institucional en el sector salud,educativo, y aéreas médico-científicas del país; a fin de contribuir a la legislación en el marco del desarrollo humano, equidad y justicia, luego de un tiempo transcurrido y con algunos buenos logros conseguidos, consideró de importancia la realización del “Primer Congreso Boliviano de Bioética”, que fue realizado en septiembre del año 2.001cuya sede fue la ciudad de La Paz, consolidando los Comités Departamentales en todo el país, para una difusión multiinstitucional, abierta y ampliamente participativa de la Bioética, cuál la necesidad de su aplicación práctica en la sociedad y cuáles sus alcances actuales y futuros. (1y2)
El Comité Nacional de Bioética (CNB) estará conformado por representantes de los ministerios de salud y educación, instituciones profesionales con los colegios profesionales en salud y otros interesados, instituciones académicas, dígase universidades, academias e institutos de investigación y finalmente instituciones sociales como la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, Defensoría del Pueblo y Defensorías de la Salud. (2)
En cuanto a su misión, el CNB debe impulsar el desarrollo conceptual, normativo y aplicado de la Bioética, en el marco del respeto y defensa de los derecho humanos, promoviendo una práctica cada vez más humanizada y acreditada de la Medicina y la atención en salud. (2)
Sus fines principales, a través de las comisiones operativas de proyección a la comunidad, capacitación de Recursos Humanos e Investigación, serán:
Incorporación y observancia permanente de los principios de la Bioética Clínica, bioética en la Investigación y bioética aplicada en la Salud Publica y funcionamiento de servicios.
Actualización sobre conocimientos, y avances de la Bioética a diferentes instancias públicas, como Universitarias.
Incorporar la enseñanza de la Bioética en la Universidades e institutos del sector.
Relacionar la Bioética a los principios de equidad, solidaridad, y justicia sociales en el desarrollo de las acciones esenciales de Salud Pública, tanto en la enseñanza como en la práctica y a nivel de toma de decisiones.
Promover comités de Ética Hospitalaria y de servicios de salud ambulatorio
En la propuesta elaborada, la estructura del CNB está dada por los Comités Departamentales de Bioética (CODEBs), que de manera autónoma replican la conformación, misión, y fines del CNB en los departamentos del país, coordinados por un Consejo Nacional que los Incorpora e integra. (2)

Fuente: (1) www.ops.org.bo/bioetica/informe.htm
(2) Luna Orosco J. “Bioética”. Rev. Med. Colegio Médico de La Paz. Vol.8 No.1. Año 2002

DE LOS COMITES DE BIOETICA.

1.1. Del Comité de Bioética Médica

1.1.1 DEFINICION.- El Comité de Bioética del Colegio Médico de Bolivia es la instancia que marca la pauta sobre la opinión Institucional de los Médicos en los temas concernientes a la Bioética, en la finalidad de analizar y pronunciarse en los temas de su competencia.
1.1.2 CONFORMACION.- El Comité de Bioética estará conformado por 7 miembros a nivel nacional y departamental.
1.1.3 REPRESENTACION.- El Comité de Bioética representara al Colegio Médico de Bioética en todos sus eventos en que el tema bioético sea motivo de análisis o estudio.
1.1.4 FUNCIONAMIENTO Y FORMA DE EXPRESION.- El Comité de Bioética se reunirá en las instalaciones del Colegio Médico respectivo por lo menos una vez al mes y emitirá sus informaciones por escrito, elevándolos a conocimiento del Comité Nacional de Bioética, así como del Consejo Departamental de Jurisdicción.
COMITÉ NACIONAL DE BIOETICA
La función del Comité Nacional de Bioética es analizar los informes de los Comités Departamentales, fijar su posición y hacerla conocer al Consejo Nacional para que se constituya en la opinión oficial del Colegio Médico de Bolivia, en los temas inherentes a su competencia.
1. ELECCION Y DURACION.- Los miembros del Comité de Bioética duraran dos años en sus funciones, debiendo ser elegidos en el congreso departamental o nacional ordinarios, según corresponda, de acuerdo a terna elevada por el tribunal de ética nacional y departamental.
2. ORGANIZACIÓN.- Los miembros del Comité de Bioética elegidos democráticamente, conformaran de entre sus miembros un directorio conformado por un presidente, un secretario general, un secretario de actas y tres vocales.
3. ADSCRIPCIONES. Todo Médico Colegiado que tenga interés en participar en el Comité de Bioética de su jurisdicción, podrá solicitar la adscripción al mismo a través del Consejo Departamental, con la finalidad de enriquecer y fomentar el estudio de la Biética y permitir el debate científico sobre los diversos temas.
___________________________
Fuente: COLEGIO MEDICO DE BOLIVIA. ESTATUTOS Y REGLAMENTOS DEL COLEGIO MEDICO DE BOLIVIA.Estatuto y Reglamento de los Tribunales de Ética y Deontología, Comités de Bioética y Comités de normas de la Investigación Biomédicas. Pág. 259-261. Trinidad-Beni 2.008

CÓDIGO INTERNACIONAL DE
ÉTICA MÉDICA

Adoptado por la 3ª Asamblea General de la Asociación Médica Mundial Londres, Inglaterra, octubre 1949, última enmienda la 35ª Asamblea Médica Mundial Venecia, Italia, octubre 1983.
Adaptado de: http://www.wma.net/s/policy/c8.htm

DEBERES DE LOS MÉDICOS EN GENERAL
• Mantener siempre el más alto nivel de conducta profesional.
• No permitir que motivos económicos influyan en el ejercicio libre e independiente del juicio profesional de sus pacientes.
• Dedicarse a proporcionar un servicio médico competente, con plena independencia técnica y moral, con respeto y compasión por la dignidad humana, en todas las formas de práctica médica.
• Tratar con honestidad a pacientes y colegas, y esforzarse por denunciar a los médicos débiles de carácter o deficientes en competencia profesional, o a los que incurran en fraude o engaño.
Se considera conducta no ética lo siguiente:
* la publicidad hecha por el médico, a menos que esté autorizada por la leyes del país y el Código de Ética Médica de la asociación médica nacional.
* el pago o recibo de cualquier honorario u otro emolumento con el sólo propósito de obtener un paciente, recetar, o enviar a un paciente a un establecimiento.
• Respetar los derechos del paciente, de los colegas y de otros profesionales de lasalud, y salvaguardar las confidencias de los pacientes.
• Actuar sólo en beneficio del paciente cuando preste atención médica que pueda debilitar la condición mental y física del paciente.
• Obrar con suma cautela al divulgar descubrimientos o nuevas técnicas, o tratamientos a través de canales no profesionales.
• Certificar sólo lo que él ha verificado personalmente.

DEBERES DE LOS MÉDICOS HACIA LOS ENFERMOS
• Recordar siempre la obligación de preservar la vida humana.
• Dar a sus pacientes todos los recursos de su ciencia y toda su lealtad. Cuando un examen o tratamiento sobrepase su capacidad, el médico debe llamar a otro médico calificado en la materia.
• Guardar secreto absoluto de todo lo que se le haya confiado, incluso después de la muerte del paciente.
• Prestar atención de urgencia como deber humanitario, a menos de que esté seguro que otros médicos pueden y quieren prestar dicha atención.

DEBERES DE LOS MÉDICOS ENTRE SI
• Comportarse hacia sus colegas como él desearía que ellos se comportasen con él.
• No atraer los pacientes de sus colegas.
• Observar los principios de la "Declaración de Ginebra", aprobada por la Asociación Médica Mundial.
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Fuente: : http://www.wma.net/s/policy/c8.htm